NOVEDADES

Sorteo de Octubre para todos nuestros lectores – Frost Graves Reglamento y Mago

Bueno lanzamos en sorteo del mes para todos los lectores. Y lo hacemos de la mano de Mundoforja, la tienda Valenciana y online donde todo el hobbie lo encuentras al mejor precio…. (publicidad por si no se ha notado jejjee).

mundoforja

En verdad lo mejor es su servicio y ciertamente sus precios en todos sus productos son bastante competitivos, por lo que siempre son una magnifica opción para comprar vuestras necesidades frikis. Pero ademas en la tienda física, la comunidad sigue creciendo una barbaridad alrededor de la tienda y cada fin de semana esta llena de eventos y torneos.

Frost Grave sorteoPues este mes para todos los que os interese, tenemos junto a ellos el sorteo de un reglamento en ingles del juego Frost Graves y de una miniatura de  mago a vuestra elección del juego.

Para participar, siempre nos gusta buscar vuestra creatividad… así que debéis dejar un comentario en esta entrada un nombre de un hechicero, un colegío o tipo de magia al que pertenece y una pequeña historia/introducción de su vida. Ale a darle a la imaginación. Los tres mejores entran en el sorteo como siempre.

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5 comentarios

  1. Esta es la presentación de Kabili el brujo, espero que os guste o_O

    Era de noche en el valle, los tambores tocaban en el poblado, en su tienda las llamas no mentían, había lanzado los huesos, sacrificado las aves, todos los augurios eran favorables, además lo veía en las llamas…el era Kabili el brujo corazón de piedra, y su momento se aproximaba…
    Dejo que su espíritu abandonase su cuerpo y flotase otra vez hasta el felino y vio a través de sus ojos.Era el poblado de sus enemigos, situado en la espesura de la selva, como felino salto la empalizada y se infiltró sin hacer el menor ruido, pero no era necesario, los vigías dormían apoyados en sus lanzas, al igual que el resto de la tribu, la poción que había filtrado esa mañana en el pozo de la tribu había funcionado a la perfección, dejando a todos en un sueño profundo y letal como era de esperar, la había confeccionado con salvia nocturnis, recogida durante el último equinoccio, un ingrediente raro pero infalible si se usaba bien.

    Se puso las pinturas mágicas de guerra, recogió su bolsa, llena a rebosar de todos los ingredientes y muestras que el y Moroni, su fiel aprendiz, habían recogido en los últimos meses, salio de su tienda y reunió a los guerreros rumbo al poblado enemigo a rematar el trabajo…pronto sería el momento del ritual.

    Al llegar la mañana solo quedaban cenizas del poblado enemigo, su tribu ya era la dueña del valle, pero a Kabili eso no le importaba, había conseguido el penúltimo ingrediente del ritual, el corazón de un jefe enemigo arrancado en vida de su pecho, ahora estaba en su bolsa con los demás y pronto se alzaría la luna de sangre, el momento del ritual. Miró a Moroni y este asintió, tenían dos días para llegar al atolón y organizarlo todo antes de que la luna llegase a lo más alto, solo así Kabili seria uno con la tierra, con las bestias y los elementos, obtendría el conocimiento más amplio y terrible.

    Al llegar la noche de la luna de sangre todo estaba listo: el cuenco ceremonial de ónice, las primeras gotas del rocío de verano, la mandrágora recogida bajo un ahorcado inocente, polvo de huesos de un venado albino, las escamas de un tritón, y un sinfín de rarezas más, incluido el corazón arrancado al jefe entre fuerte gritos con la misma daga ceremonial que Kabili empuñaba en ese momento.
    Moroni se acercó nervioso:
    -Amo, esta todo? Ya llega el momento.
    -Casi, mi aprendiz; oh, mi fiel aprendiz, siempre fiel, solicito y también, ambicioso.
    Kabili se giro bruscamente y con un ágil movimiento degolló limpiamente a su aprendiz, quien aun conservaba la expresión de sorpresa al desplomarse.
    Y ahí, estaba el último ingrediente: la sangre repleta de ambición de un joven brujo. El ritual podía comenzar.

    Al llegar el alba, Kabili ya no era el mismo, al menos en esencia, notaba el poder bullir bajo su piel de ébano, las pinturas mágicas se habían grabado en su piel, sus sentidos eran más agudos y conocía el secreto de pociones, encantamientos y rituales que nunca había conocido. Ahora sí era un brujo, y no la burda imitación que había sido toda la vida, que pensarían los que hasta ahora le habían venerado, de repente el valle y el atolón se le antojaban pequeños, su destino era mayor, naciones enteras le adorarían y le temerían, hoy empezaba su viaje y su conquista.

    Se giró y miró con frialdad lo que quedaba del cuerpo de Moroni, era el momento de buscar un nuevo aprendiz.

  2. juncodelbosque

    Mi nombre es Ibrahim Ahmed ibn ras Mohammed ben Issalem, consejero del emir Suleim el Inconmensurable y gran invocador de la torre de marfil y oro de la capital del califato, aunque si os resulta más fácil podéis llamar Ibrahim, a este vuestro humilde servidor.

    Muchos son los títulos y honores que acumulo, pero no siempre fue así, mis orígenes son los más humildes, en mi infancia no era más que uno de los muchos pilluelos que habitaban las polvorientas calles de la capital, siempre barridas por el polvo y la arena. Huyendo cada día de los problemas, ocultándome de los asesinos dispuestos a matar por una migaja, de los tratantes de esclavos propuestos a ganar unas monedas vendiendo niños a las casas de placer y todos aquellos depredadores propios de las calles y el bazar. Robando para comer, siempre dispuesto a aligerar a los viajeros de sus pesadas bolsas y a los vendedores de sus mercancías sobrantes.

    Y así cambio mi vida el día que cogí la bolsa de quien no debía, un hombre pudiente de edad avanzada que paseaba por el bazar a la búsqueda de nuevas «curiosidades», presa fácil fue la bolsa, o lo habría sido de no llevar una guardia personal de seis miembros bien armados y entrenados que me persiguieron hasta un callejón, dispuestos a impartir justicia sumaria. Mi miedo al ver las cimitarras cercanas me llevo al trance en que tantas veces había caído antes, un viento huracanado barrio la calle cegando momentáneamente a los guardas y desapareciendo tan pronto como había venido. Los guardias fueron parados por su amo, mi victima, era mi predecesor y mentor, el hombre que en su búsqueda de rarezas mágicas reconoció mis ojos grises (raros en mi raza y propios de los que pueden ver más allá de los velos y planos de la existencia), reconoció en mí el poder que más tarde me enseño a identificar, potenciar, y doblegar a voluntad, a él le hable de mis noche de trance y de las apariciones proyectadas quedando después exhausto. Me crio como un hijo, me enseño que aquel día en el mercado lo que había hecho era invocar a un yinn menor de viento, me enseño a reconocer a los demonios, efrits, genios y otros seres disformes. A invocarlos, a nombrarlos y dominarlos, pues estos seres no gustan de abandonar su plano y obedecer a un simple mortal.

    Me hizo su pupilo, su heredero y con mi potencial y sus enseñanzas me convertí en el más grande mago del califato, teniendo a mi alcance los más arcanos textos y objetos. Así fue como di con un libro que cambio de nuevo mi vida, permitiéndome invocar a un poderoso efrit de fuego, ser malévolo que leyendo la ambición que habitaba en mi interior desde niño, me hablo de una ciudad de hielo, una ciudad más allá de donde viajan las caravanas, más allá del gran lago salado, donde la nieve es sempiterna, a la que acudían magos de todos los rincones y condiciones, una ciudad que escondía un poder enorme para quien pueda alcanzarlo.

    Y hacia allí me dirijo ahora, con mis ojos grises puestos en el horizonte, mi tez morena cortada por el frio, con solo una bolsa y la única compañía de los seres que invoco para orientarme en este viaje. Dispuesto a obtener un poder sin límites o a caer en la trampa del efrit, pues ese demonio es un ser caprichoso y vengativo y nadie sabe a que clase de peligros o trampas me envía, solo sé que en cualquier caso las emprenderá conmigo pues ahora el efrit es…

    … mi siervo.

  3. Mag Petrosky, señor de la piedra.
    Originario de Uralia, paso la infancia viendo como su padre y sus hermanos mayores tarjaban en las canteras de piedra, ya que en aquellas tierras, se obtenía la piedra más resistente conocida y esta era muy solicitada para construir resistentes fortalezas.
    Aunque el trabajo estaba bien remunerado, el tiempo y el esfuerzo que necesitaban para poder obtener un bloque adecuado era excesivo y la vida en esas tierras era muy dura, por lo que la familia a duras penas sobrevivía
    Por culpa su debilidad y tendencia a estar enfermo, aunque siempre quiso ayudar, no servía para el trabajo de cantería, así que pasaba casi todo el tiempo con su madre. Esta misma fue quien le enseño a leer y a escribir.
    Recién cumplidos los 9 años, una mañana, según se asomaba por la ventana de la maltrecha cabaña familiar, vio como pasaba un carromato conducido por un peculiar personaje de barba, gorro y ropajes grises. El carro dio un bote a causa de una piedra que había en el camino, y vio como caía un objeto. Tan rápido como pudo, salió a recogerlo, pero para cuando tuvo el objeto en sus manos, el carromato había desaparecido en la distancia.
    Este objeto, le cambio la vida para siempre.
    Era un libro que hablaba sobre la magia y sobre una escuela en la cual se podía aprender a usarla. Paso todo su tiempo libre leyendo el libro, soñando que adquiriendo esos poderes, podría ayudar a su familia en la cantera. Y así, una noche, se escapó de casa en busca de esa escuela.
    Durante años su familia, no supo nada de él.
    Un día, mientras todos trabajaban duramente en la cantera, apareció un un individuo vestido de túnica gris y con la cabeza tapada por una capucha del mismo color. Con una voz joven, dijo que iba ayudar a la familia en la cantera. Tras unas extrañas palabras, aparecieron unos destellos en la dura roca, obteniendo 10 bloques perfectos y dejando a la familia impresionada.
    Cuando la demostración dio a su fin, se echó la capucha atrás y el padre pudo reconocer que era el hijo desaparecido diez años atrás.
    Había pasado todo ese tiempo en la escuela de magia mencionada en el libro que encontró, conociendo todos los secretos sobre los hechizos referentes a la piedra. Ahora se había convertido un joven portento de los magos de piedra.

  4. Buenas, Aquí os presento a Zekel «el chatarrero» un Mago de la escuela de la Mecánica (esta escuela de la magia me la he cuajado un poco :D).

    Hijo de Ironking, líder y maestro artesano de la tribu Metalhand, tribu dedicada al trabajo del metal. Zekel fue educado en la religión del fuego y el agua. Y entregado a los tres años a los sacerdotes del templo-forja donde debía ser educado en la artesanía y el culto, a fin de llegado el día sustituir a su padre al frente de la tribu.

    Esta educación lo llevo a aprender desde muy niño los secretos del metal y el fuego. Y aunque su destino se encontraba proyectado hacia las forjas y las profundidades de las minas, Zekel no era ajeno a los vientos de la magia, lo que conllevo que el joven casi de una forma innata comenzara a trabajar el metal de formas poco ortodoxas.

    Durante generaciones la tribu se asentó en los principios del trabajo manual, alejándose de las prácticas mágicas, las cuales fueron repudiadas como sacrílegas a ojos de sus sacerdotes. Es por ello que cuando fue descubierta la capacidad del joven para manipular el metal y sus propiedades generó gran recelo entre sus congéneres, poniendo en entredicho a la propia familia gobernante. El descubrimiento de las capacidades del joven no pudo venir en peor momento, pues la gran sequía había llegado y todas las vetas se habían secado. Considerando esto un mal presagio por parte de los miembros del consejo del fuego (órgano de consulta de Ironking). El gran líder temeroso de que su poder fuera puesto en entredicho y usurpado por sus competidores, decidió desterrar al hijo a fin de mantener sus dominios.

    Desde ese día Zekel fue borrado de la memoria de la tribu. Pero liberado del yugo de las creencias de sus antepasados pudo desarrollar su magia. Y ahora camina por el mundo como un vagabundo de piel de oro blanco (efectos secundario de sus prácticas alquimistas), acompañado sólo de extraños seres y artefactos de metal, los cuales funcionan y se comportan como si de entes orgánicos se tratasen.

  5. Aqui os dejo mi personaje, su nombre, su escuela y un micro-relato. Hiel Tonelesky, nigromante.

    «Hiel no estaba preocupado. Escuchaba a los perros ladrar y a los cazadores hablando entre sí a voces. Estaban cada vez más cerca, abriéndose paso entre los árboles y la nieve. En pocos minutos llegarían al claro. Su claro. Volvió la vista atrás hacia sus fuerzas. Con ayuda de su aprendiz había alzado a media docena de cadáveres; zombis que ahora se tambaleaban esperando unicamente poder cumplir sus deseos. Al principio sólo había sido uno, robado del cementerio de la aldea cercana. Luego, en el bosque, les encontró un leñador y entonces fueron dos. Ahora los batidores que llegaban al claro; sin duda destruirían a alguna de sus creaciones, pero él, Tonelesky, acabaría por imponerse y entonces aquellos hombres e incluso sus bestias formarían parte de sus huestes. Cada batalla, cada enfrentamiento sólo tenía un desenlace, sólo podía hacerle más fuerte.
    ¿Cómo podían aquellos idiotas no entenderlo? se preguntó al ver entrar en su claro al primero de los cazadores y a su perro.»

    Espero que os haya gustado. =)

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