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Desde Nuestros amigos Wkihammer 40k, seguimos profundizando en el tema Orkos y os traemos interesante información sobre la poderosa fisología piel verde. Para que sepáis a lo que os enfrentáis.
La fisiología Orka es simple y robusta, y permite a los Orkos sobrevivir a las lesiones más terribles y aun así volver para seguir peleando.
Fisiología y biología
Los Orkos son una simbiosis de los animales y los hongos en el nivel más básico. El lado animal Orkos vive en completa armonía con el lado de los hongos y cada una ayuda a la otra y se unen para formar un ser duro y resistente. Un ejemplo de esto se encuentra al comparar un Orko a un ser humano. Parece ser que el hongo permite al cuerpo del Orko negar la utilización de complejos órganos internos, el sistema inmunológico y la anatomía del aparato reproductor. El hongo por lo tanto, permite que al Orko reducir el número de posibles lesiones potencialmente fatales, mejorando aún más su supervivencia. El lado animal de los Orkos, sin embargo, sugiere una primitiva forma de vida basada en el patrón del crecimiento omnívoro; los Orkos confian los unos en otros la caza de comida, etc. La característica más interesante, sin embargo, es la falta de cualquier señal de una evolución o proceso evolutivo. Esto indica que los Orkos se hayan creado o hayan aumentado, como resultado de una ingeniería biológica muy avanzada. Si esto es cierto, entonces es probable que los Orkos se representan los combatientes definitivos: fuertes, resistentes, duraderos y agresivos a las modificaciones biológicas.
La característica más sorprendente de los Orkos es su piel verde. Combinado con su sangre verde, los Magos Biologis han llegado a la conclusión de que, en lugar de una completa confianza en el consumo de nutrientes en forma de alimentos, los Orkos tienen la capacidad primitiva y básica de la fotosíntesis. Esto les daría una enorme ventaja sobre otras razas, ya que pueden reducir sus líneas de suministro de municiones y combustible y todas las otras partes de la guerra, pero sin la necesidad de transportar productos perecederos. La sangre de un Orko también es interesante, ya que contiene un sinnúmero de organismos fúngicos diferentes y tiene un alto contenido de clorofila, con rastros de carbón y cobre. Esto explicaría el color verde de la sangre y muestra que la fotosíntesis es una parte importante de la estructura de Orkos.
La cabeza del Orko es, como muchos xenos de la galaxia, de diseño similar a la del cráneo humano, aunque sea de una forma diferente y de otro color. Los dientes sugieren una dieta omnívora y oportunista, que enlaza con su primitiva forma de vida basada en la organización. El cráneo, al igual que muchas otras partes del cuerpo Orko, es mucho más grues que la de un ser humano, dándole una dureza muy superior a los seres humanos. Es poco probable que los colmillos en la cara del Orko estén relacionados con el consumo de alimentos (a pesar de que los Orkos, además de la fotosíntesis, también consumen los alimentos, principalmente garrapatos) y son más para la decoración o de combate, más probable esta última. Tienen orejas puntiagudas como los Eldar, aunque tienen una baja densidad de grupos de nervios, lo que indica una simplicidad mayor para acercarse a lo esencial para la creación de Orkos. Todo esto da a los Orkos un cuerpo simple, eficaz y duradero, lo que les permite luchar bien, pero pasando por encima de la calidad de la sensibilidad.
Los órganos internos de los Orkos, como se ha señalado, son simples y efectivos, apoyándose en su elementos fúngicos. Tienen un grandes multi-cámaras en el estómago que se alimenta de un sistema renal crudo. Esto, combinado con la «sopa de hongos», un relleno de cavidades (que tiene el efecto de la sustitución de los órganos bioquímicos (hígado, riñón, bazo, páncreas, etc) da a los Orkos un sistema interno de intensidad fuerte, a pesar de que es bastante básico en el diseño.
Los huesos de un Orko son gruesos, duros y resistentes, lo que les permite soportar los impactos de alta velocidad sin fractura o daño. La estructura es similar a la de los humanos, pero el núcleo del hueso contiene una materia esponjosa de hongos, en sustitución de la médula ósea de los humanos.
El cerebro Orko es bastante grande, con estructura similar a la de un humano o Eldar. Tiene, salvo excepcionalmente, una completa falta de materia fúngica o vegetal. La parte más desarrollada es la del viejo cerebro, que controla las funciones más básicas que explican su agresividad natural y sus estrategias de caza.
Finalmente, gran parte del cuerpo Orko está lleno de una masa esponjosa, presumiblemente para proteger los pocos órganos internos que Orko posee. También hay varias branquias ubicadas en todo el cuerpo Orko, probablemente para la absorción de oxígeno.
La estructura y el diseño del cuerpo Orko proporciona un sistema fuerte, duro y resistente, pero también tiene un nivel bajo de complejidad. Estos se combinan y muestran que los Orcos son manipulados genéticamente para el combate. Sus músculos son muy fuertes y sus cuerpos pueden soportar inmensos castigos.
