Hoy recopilamos este artículo del blog La luz de Valinor, que escribio hace ya más de un año, para que podáis dsifrutar de este buen trabajo de recopilación de datos sobre las Hermanas de Batalla y las 6 grandes ordenes que conocemos. Sin duda un artículo para conocer mejor a las guerreras hermanas.
Orden de la Rosa Ensangrentada:
Esta Orden no fue creada formalmente hasta dos milenios y medio después de la fundación del Adepta Sororitas, y por aquella época su Santa patrona, Mina, llevaba largo tiempo muerta. Mina era conocida por ser una oscura y amenazante guerrera, la más agresiva e impetuosa de las compañeras de Alicia Dominica, y su símbolo, adecuado a su carácter, era una rosa roja espinada. Las hermanas de batalla de la Rosa Ensangrentada, resplandecientes con su servoarmadura carmesí, emulan los deseos de Santa Mina de aniquilar a sus enemigos lo más rápido posible, y sus escuadras de Dominadoras son conocidas por la ferocidad de sus asaltos.
Análisis: ¿Quién dijo miedo? Estas son, sin duda, las más aguerridas y valientes de las Sororitas. En el adoctrinamiento se fomenta su agresividad, ya que deben ser la representación de la ira divina, así como la resistencia al dolor y al miedo. También se primará sobre todo el entrenamiento físico. Esto no significa, por supuesto, que dejen de lado ni por un instante la devoción (al fin y al cabo, son Sororitas), pero sí es probable que den más importancia a la potencia física, especialmente a la fuerza y agilidad, razón por la cual las escuadras más prestigiosas de la Orden son las Dominadoras (armas especiales de corto alcance) y probablemente también las Serafines (ataque rápido). El hecho de que las entrenen para exaltar sus emociones en lugar de reprimirlas también significa que son las más «humanas» de las Sororitas, las que con más libertad viven sus sentimientos, y las que más probabilidades tienen de iniciar amistades profundas y relaciones amorosas (de hecho, la única hermana de batalla envuelta en una relación romántica de la que se tiene noticia en el trasfondo oficial del 40K, es una Celeste de la Rosa Ensangrentada), pero la impulsividad y la impaciencia por entrar en combate también hacen que sean las más vulnerables de todas a caer en una trampa o celada orquestada por el enemigo. Serían bien capaces de machacar a un pelotón de berserkers de Khorne sin despeinarse (son casi tan brutas como ellos), pero que el Emperador se apiade de ellas si se enfrentan a cultistas de Tzeench…
Puntos Fuertes: Aguerridas, apasionadas y optimistas.
Puntos Débiles: Impulsivas, impacientes y coléricas.
Unidad predilecta: Dominadoras.
Talento Bonificado: Fuerza y/o Agilidad.
Sugerencia de interpretación: Eres el ángel vengador que lleva la Sagrada Cólera del Emperador a sus más abyectos enemigos. Posees una gran fortaleza física y mental, y te enorgulleces de ello. Sueles decir lo que piensas, no tienes miedo a mostrar tus sentimientos, y tampoco tienes dobleces: lo que la gente ve de ti, es lo que eres. Vives tu devoción a fondo, amas al Emperador con todas tus fuerzas, y no te avergüenza en absoluto llorar de emoción o reír de alegría cuando entonas himnos y alabanzas en su nombre. También amas a tus hermanas y a tus aliados, por quienes darías la vida y derramarías tu sangre sin dudar. Sin embargo, tu corazón apasionado es tan pronto para el amor como para el odio, y cuando te enfrentas al enemigo es posible que a veces la rabia te impida pensar. Ten cuidado e intenta pensar antes de actuar, o tus rivales podrían aprovecharse de tu impulsividad para conducirte a una trampa.
Orden de Nuestra Señora Mártir:
Katherine era reconocida como la segunda al mando de Dominica. Su orden fue nombrada inicialmente «Orden del Corazón Ardiente», en referencia al fogoso carácter de Katherine, pero sus hermanas de batalla lloraron tanto su muerte que se renombraron a sí mismas como «Orden de Nuestra Señora Mártir», y durante muchos siglos vistieron exclusivamente de luto. Incluso entre las guerreras más devotas del Sororitas, las hermanas de Nuestra Señora Mártir tienen reputación por su increíble determinación, inspirada por el deseo de vengar la muerte de sus caídas. Su fuego interior las empuja a destrozar al enemigo por completo, y sin piedad.
Análisis: Al igual que sus compañeras de la Rosa Ensangrentada (por algo son compañeras y vecinas en el Convento Sanctorum), las hermanas de Nuestra Señora Mártir son fogosas y sentimentales. Sin embargo, lo que ellas tienen de coléricas, éstas las tienen de vengativas: lo suyo no es tanto la ira sagrada como la justicia divina, y la imparten de modo implacable: jamás conceden cuartel, jamás toman prisioneros, y no conocen la piedad. Todas su emociones positivas las vuelcan en sus hermanas de batalla y en el Emperador, con los cuales establecen lazos de afecto poderosísimos, pero el resto del mundo es otra cuestión. Matar a un cultista del Caos es algo que cualquier hermana de batalla haría sin vacilar, pero si se trata de purgar a enemigos menos oscuros (es decir, desviados pero no necesariamente malvados), como una comunidad de mutantes o un grupo de herejes meramente doctrinales, las hermanas de Nuestra Señora Mártir son la más indicadas, puesto que son las menos proclives a mostrar compasión aunque los condenados lloren suplicando por su vida. Sin embargo, esto también será una ventaja a la hora de protegerlas contra los engaños del enemigo, pues no se dejarán conmover con facilidad aunque algún artero traidor intente fingir arrepentimiento o debilidad ante ellas. También son las más determinadas y voluntariosas de las Sororitas: cuando tienen una misión, no importa las dificultades o las penalidades que tengan que sufrir, la cumplirán hasta el final o morirán en el intento. Eso sí, cuidado con las misiones a las que se las envía, porque tienen una irritante tendencia a no dejar supervivientes, y muchas veces la Inquisición necesita que alguien sobreviva para poderlo interrogar.
Puntos Fuertes: Decididas, justas y voluntariosas.
Puntos Débiles: Vengativas, implacables y despiadadas.
Unidad predilecta: Celestes.
Talento Bonificado: Habilidad de Armas y/o de Proyectiles.
Sugerencia de interpretación: Felicidades, eres miembro de la Orden más conocida de la Galaxia. Cuando se le pide a un ciudadano imperial que imagine a una hermana del Adepta Sororitas, nueve de cada diez veces se la va a imaginar con tu armadura y tu librea, y lo sabes. Eso significa que tienes una gran responsabilidad, como sin duda tu Superiora siempre se encargará de recordarte: la de dejar bien alto el listón y la merecida fama de tu Orden. Por ello, sabes que no puedes permitirte cometer errores ni vacilar. has aprendido que la fe es tu fuerza y la compasión es tu debilidad: el Emperador es la única salvación y la única verdad posible para la humanidad, y todo el que no lo vea debe ser purgado. Tus oídos son sordos a ruegos de clemencia, peticiones de negociación o rendiciones: tienes un deber que cumplir, la verdad es innegociable, y al enemigo se le aniquila, no se le perdona. Puede que sea duro, pero sabes que la única forma de conservar la pureza y la cordura intactas en el implacable mundo en que te ha tocado vivir, es ser todavía más implacable que él. Jamás darás cuartel a tus enemigos, porque sabes demasiado bien (tu Santa patrona es la mayor muestra de ello, pero no la única) que ninguno habrás de recibir. Mejor matar a cien desviados que llorar la pérdida de una sola de tus hermanas.
Orden del Corazón Valeroso
Las hermanas del Corazón Valeroso creen que tienen el deber de expiar la involuntaria traición que las Sororitas cometieron al apoyar el Reinado de Sangre de Vandire. La Santa fundadora de la Orden, Lucía, era la mayor penitente de las compañeras de Dominica, y sus hermanas de batalla tratan de emular su ejemplo buscando la expiación por el más mínimo pecado que perciben. Como resultado, un desproporcionado número de ellas buscan la redención tomando los votos de Arrepentidas. Santa Lucía es representada con frecuencia sosteniendo la calavera del ejecutado Lord Vandire, como recordatorio de que nunca se debe prestar atención a las palabras de los falsos profetas.
Análisis: Démosle la bienvenida a las Sororitas más emo. La tercera Orden del Convento Sanctorum también prima la pasión por encima de la lógica, pero a diferencia de sus hermanas de la Rosa Ensangrentada y Nuestra Señora Mártir, vuelcan la agresividad y la dureza contra sí mismas en lugar de proyectarla hacia el exterior. Las hermanas del Corazón Valeroso saben bien que la mayor enemiga de todas es una misma: el Emperador es el único ser perfecto, todos los demás humanos tienen un lado oscuro, y más vale dominarlo y doblegarlo como sea o el precio a pagar puede ser muy caro. Las Hijas del Emperador ya cayeron una vez por escuchar a quien no debían, y es perentorio que tal cosa jamás vuelva a suceder. Por ello, las hermanas de esta Orden tienen muy poca paciencia y nula tolerancia contra cualquier herejía o desviación que se aleje de la doctrina oficial, por mínima que sea. Son aún menos transigentes consigo mismas, y la reflexión, el examen de conciencia y la penitencia son una constante en sus vidas. Casi todas se azotan a diario con la scoriada, y sus votos son los más estrictos y restrictivos de todo el Adepta Sororitas. No tienen en gran estima su propia vida, e incluso las que no toman los votos de Arrepentidas luchan y combaten con manifiesto desprecio hacia sus propias vidas. De todas las Sororitas, son las que tienen más afición por la lucha cuerpo a cuerpo.
Puntos Fuertes: Puras, castas y valientes.
Puntos Débiles: Melancólicas, estrictas y fatalistas.
Unidad predilecta: Arrepentidas.
Talento Bonificado: Resistencia.
Sugerencia de interpretación: Eres una persona taciturna y melancólica, y probablemente te hicieron mucho daño en tu vida, mucho más incluso que a las otras huérfanas de la Schola Progenium. El negro es tu color, la tristeza es tu sentimiento, y el martirio tu destino. ¿Cómo podrías estar alegre sabiendo que, por mucho que hagas, jamás conseguirás erradicar todo el dolor, la injusticia y el sufrimiento que asolan el universo? Aún así, jamás dejarás de intentarlo, porque es lo mínimo que le debes al Sagrado Emperador después del sacrificio que hizo por la Humanidad y del tremendo error que tus antecesoras cometieron al apoyar a Vandire. Las lágrimas de las víctimas inocentes, pasadas y presentes, se te clavan en el corazón como dardos, y sólo el dolor que la scoriada provoca golpeando tu espalda es capaz de aliviar en parte el sufrimiento que anida en tu corazón. Y lo que es peor; cada pecado, cada infracción, por pequeñas que sean, hacen aún más pesada la losa que se hunde en tu alma. Anhelas morir gloriosamente en combate, pues el martirio es el fin del sufrimiento y la máxima bendición. De hecho, ahora que lo piensas, ayer te retrasaste dos minutos en llegar a la capilla para los rezos de vísperas… ¿no deberías tomar los votos de Arrepentida?
Orden de la Rosa Sagrada
Al igual que la Orden de la Rosa Ensangrentada, esta Orden tampoco fue fundada en vida de su Santa patrona, Arabella. En vida, Arabella se ganó el sobrenombre de «Libertadora», y muchas de sus hermanas de batalla, especialmente las Vengadoras, son conocidas por rezar pidiendo su inspiración para liberarse de las dudas o de la precipitación cuando necesitan conservar la mente fría y lógica. De todas las guardaespaldas de Dominica, Arabella era conocida por su templanza y disciplina. Sin embargo, bajo su serenidad permanecía la determinación de una guerrera resuelta, y por ello su símbolo es una rosa blanca sujeta por un guantelete. Las hermanas de la Rosa Sagrada, con sus armaduras blancas, encarnan esas mismas virtudes.
Análisis: Las hermanas de la Rosa Sagrada son la antítesis de las de la Rosa Ensangrentada: se guían por la razón, la templanza y la fría lógica. Dan mucha importancia a la meditación y la introspección en su entrenamiento, y cultivan la mente tanto como el físico. Es habitual que las hermanas de esta Orden realicen retiros espirituales y mediten largamente sobre versículos píos o episodios de las vidas de santos, especialmente de su patrona, santa Arabella. En la Orden de la Rosa Sagrada se ven con malos ojos los excesos emocionales y se fomentan la calma, la reflexión, la serenidad y la lógica. Por ello, sus hermanas de batalla son capaces de mantener la cabeza fría hasta en lo más intenso del combate, razón por la cual sus hermanas Vengadoras son tan afamadas; sus armas pesadas, imprescindibles para enfrentarse a enemigos descomunales o destruir carros blindados, necesitan usuarias capaces de mantener la calma y la disciplina incluso en las circunstancias más extremas. Es muy difícil hacerlas caer en una trampa o una celada, ya que jamás toman una decisión sin reflexionar. Sin embargo, siguen una estricta disciplina y mantienen un férreo autocontrol en todo momento, lo cual hace que no sean capaces de expresar sus emociones y que desconfíen de cualquiera que no pertenezca a su entorno cercano.
Puntos Fuertes: Astutas, disciplinadas y racionales.
Puntos Débiles: Frías, desconfiadas y reprimidas.
Unidad predilecta: Vengadoras.
Talento Bonificado: Inteligencia.
Sugerencia de interpretación: Desconfías de los excesos emocionales, y rara vez te los permites. No sueles reír a carcajadas, casi nunca lloras, y cada vez que una emoción te exalta el pecho te esfuerzas por serenarla. El único sentimiento intenso que te permites a ti misma es la devoción por el Dios Emperador, y aún así jamás la exteriorizarás en público hasta el punto de parecer una exaltada. Jamás permites que la pasión domine tu lógica, eres reflexiva, calmada y tienes una mente aguda e inquisitiva. Eres poco dada a bromas, explosiones de alegría o estallidos de cólera, y en tu vida hay una palabra clave: moderación. No te gusta improvisar, crees que las normas están para cumplirlas, y jamás relajas la disciplina, pues eres consciente de que de nada sirven las excelencias físicas si no mantienes la mente alerta y en forma. Probablemente te gusta leer, tienes rutinas establecidas que no te gusta romper, nunca actúas ni hablas sin pensar, y necesitas practicar la meditación y la oración en soledad y recogimiento para conservar la paz y la tranquilidad.
Orden del Cáliz de Ébano
La Orden del Cáliz de Ébano es la más antigua de las órdenes militantes, fundada en los mismos inicios del Adepta Sororitas por Alicia Dominica, Santa patrona de la Hermandad. Dominica guió a sus guerreras en incontables cruzadas contra los enemigos del Imperio, y fue la primera heroína de la Historia en ser proclamada Santa en Vida por la Eclesiarquía. Los uniformes de esta Orden se basan en las ropas originales que lucían las Hijas del Emperador, y su doctrina de combate, una combinación de devoción religiosa con entrenamiento físico, ha permanecido inalterada durante cuatro mil años.
Análisis: El Cáliz de Ébano es la Orden más antigua y venerable del Adepta Sororitas, y por ello tiene gran apego a sus tradiciones. Alicia Dominica fue y sigue siendo la más grande de las Santas de Vida, por lo tanto su doctrina jamás ha de ser olvidada, y debe aplicarse en todo momento. En cierto modo, su doctrina recuerda al puritanismo amalatiano, que considera que es una herejía pretender cambiar o innovar el Imperio porque la función de la humanidad es preservarlo todo tal y como está hasta el despertar del Dios Emperador. Las hermanas del Cáliz de Ébano se sienten orgullosas de su equilibrada doctrina de combate, que básicamente es la que rige todo el Adepta Sororitas, y dados los excelentes resultados que ha tenido desde la fundación de la Hermandad, se tomarían como una afrenta personal el hecho de que alguien intentara cambiarla. Al igual que las hermanas de la Rosa Sagrada, sus vecinas del Convento Prioris, las hermanas del Cáliz de Ébano abogan por la templanza y la disciplina, aunque no rechazan la pasión y el instinto con tanta vehemencia como ellas, puesto que consideran que el equilibrio es la mejor política. Por ello, las hermanas de batalla de esta Orden dan la misma importancia a la devoción que al entrenamientos físico, y combinan ambas en una suerte de combate ritualizado que en mayor o menor medida es utilizado por todas las Órdenes del Adepta Sororitas.
Puntos Fuertes: Organizadas, equilibradas, leales.
Puntos Débiles: Conservadoras, intransigentes y orgullosas.
Unidad predilecta: Serafines.
Talento Bonificado: Voluntad.
Sugerencia de interpretación: Si algo funciona, ¿para qué cambiarlo? Ese es tu lema favorito, y miras con desconfianza cualquier cambio o innovación que aparezca en tu vida. Respetas la tradición y te enorgulleces de ella, eres segura de ti misma, leal a la Eclesiarquía y al Imperio hasta la médula. En el Adepta Sororitas has encontrado el auténtico sentido de tu vida y no tienes mayor aspiración que perfeccionarte en tus habilidades para servir a la Hermandad y al Emperador con la máxima eficiencia. Precisamente por ello, desconfías de todo lo nuevo o diferente, y tienes poca tolerancia con todo aquello que se sale de lo normal o de lo establecido. El cambio es la esencia última del Caos, de modo que cuanto más y mejor se conserven las cosas, tanto mejor para todos. Cuando te encariñas con una persona, suele ser para toda la vida, y los lazos de afecto, amistad y hermandad que tengas con tus allegadas serán casi indestructibles.
Orden del Sudario de Plata
Silvana fue la primera de las lugartenientes de Dominica en ser martirizada, asesinada poco después de que la Orden del Cáliz de Ébano se escindiera en dos órdenes militantes. Una imagen plateada de la calavera de Silvana fue impresa en su sudario, de modo que su Orden, recientemente formada, tomó el Sudario de Plata como nombre y emblema. Silvana ganó renombre por su espíritu altruista y su fe estoica. Rara vez hablaba, porque creía que las hazañas en el campo de batalla decían más de la devoción de una guerrera que cualquiera de sus palabras. Las hermanas del Sudario de Plata, del mismo modo, hablan en raras ocasiones, pero son conocidas por sus numerosos actos de generosidad y heroísmo.
Análisis: La palabra que mejor describe a las hermanas del Sudario de Plata, sin lugar a dudas, es «altruismo». Al igual que las hermanas del Corazón Valeroso, son abnegadas y prestas al sacrificio, pero a diferencia de ellas, no buscan el martirio como un fin en sí mismo, sino que lo aceptan con alegría y fortaleza cuando es el precio por salvar a los demás. Las hermanas de esta Orden saben que han sido elegidas por el Emperador para cuidar de sus fieles; los dones y habilidades de las que disponen no están al servicio de sí mismas, sino de los demás, y para ellas sus propias vidas no tienen valor si se comparan con aquello que deben proteger. Cualquiera de ellas se sacrificaría de buena gana para salvar al resto de sus hermanas, encaran con estoicismo el dolor y la muerte, y jamás actuarán por orgullo, vanidad, o buscando el beneficio propio. Sin embargo, el voto de silencio que practican hace que estén poco acostumbradas a dar su opinión o a llevar la contraria a los demás, lo cual significa que no andan muy sobradas de ingenio o de inventiva, y tampoco cultivan grandes cualidades sociales, por lo que pueden sentirse confusas y perdidas si se ven forzadas a interactuar con personas ajenas a la Hermandad.
Puntos Fuertes: Abnegadas, generosas y altruistas.
Puntos Débiles: Tímidas, ingenuas y apocadas.
Unidad predilecta: Línea.
Talento Bonificado: Percepción.
Sugerencia de interpretación: Estás dispuesta a hacer lo que sea por el Emperador y por todos los fieles y los inocentes que forman parte de su Imperio, pero necesitas que te guíen. Te han entrenado para obedecer a tus Superioras, poner a los demás por delante de ti y aceptar cualquier sacrificio sin vacilar. Por ello, es muy probable que seas una persona apreciada y estimada por todos lo que te conocen, sean hermanas del Adepta Sororitas o no. Sin embargo, tú te sientes incómoda siendo el centro de atención, eres de pocas palabras y no te gusta destacar. Tampoco eres amiga del orgullo ni de la presunción, y prefieres que tus actos, más que tus palabras, sean los que hablen por ti. Puede que no llames mucho la atención, pero cuando no estás todos añoran tu presencia silenciosa y tu discreta sonrisa. Las hermanas de esta Orden son ideales para jugadores de rol que no son dados a muchas palabras o a comentarios ingeniosos y que se agobian teniendo la iniciativa o tomando decisiones rápidas.