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Uno de nuestros colaboradores sobre Juegos de Rol, nos deja una reflexión muy interesante sobre este mitico juego:
Ahora nos encontramos en un momento en que proliferan en gran medida los juegos de rol, pero hubo una época en la que un solo juego dominaba los dados del mundo, Dungeons&Dragons, el primigenio, el origen de todo. Durante años fue el emperador de rol, determinando el devenir de todos los juegos mediante sus expansiones y campañas, con cada nueva versión perfeccionaba un poco más el juego, cuando salió 3.5 se vislumbró el culmen , la perfección estaba cerca, casi podía alcanzarla, pero entonces el poderoso cayó… El terror y la tragedia se apoderaron del glorioso juego y la versión 4.0 vio la luz, hordas de masters se agolparon frente a las tiendas para adquirir el nuevo manual, pero sólo quedaron horrorizados frente al terrible cambio sufrido…
Habrá gente que piense que 4.0 no está tan mal, que no era tan terrible, pero debéis comprender a los jugadores veteranos, esos jugadores que se santiguaban ante cuatro trasgos en AD&D o que maldecían a los creadores de trampas cuando perdían un miembro por un cepo de oso, eso era D&D, era sufrimiento, era superación, era un juego en el cual un grupo de seis jugadores de nivel uno tenían miedo a una manada de diez trasgos, porque como el master tuviese un par de tiradas espectaculares podía descuartizar al guerrero de armadura pesada usando un asqueroso cuchillo trasgo de 1D4 de daño… Eso era lo preocupante, que una pifia podía hacerte perder el arma en el momento menos inoportuno y un crítico hacia que tu personaje se elevase por encima de los mortales dando un golpe de perfección divina a un mísero trasgo.
Admito que la presentación de las aventuras y los manuales es muy buena pero, pese a todos los mapas del mundo los nuevos manuales han infantilizado el juego, dejando con dos palmos de narices a los jugadores veteranos que se han visto obligados a volver a 3.5 en busca del refugio de lo conocido.
Durante la gloriosa época de 3.5 también se cometieron errores, pero, pese a todo el juego daba libertad al master, que no tenía que recurrir a hordas de enemigos ni a infernales hiperpoderosos para achantar a un grupo de jugadores, bastaba con una cueva, una habitación oscura y unos ojos brillantes para que las peores abominaciones infernales se cruzasen por la mente de los jugadores (benditos percheros con bolas de cristal), ahora, con 4.0 necesitas el mayor de los bichos para que los personajes se planteen la huida.
Concluyendo y para no ganarme más el odio de aquellos que juegan y disfrutan de 4.0, a mi parecer, el «videojuego multiplayer» en el que han convertido Dungeons&Dragons es, a mi parecer una de las peores (si no la peor) ideas que han podido llevar a cabo y espero con impaciencia el día que se den cuenta y vuelvan a la esencia de lo que fue D&D
Saludos
Alsam
D&D,como AD&D, tiene una gran variedad de material,entornos de campaña,niveles,ayudas,…Yo me quede con AD&D porque la cantidad de material era tal que el único limite es la imaginación y la imaginación es infinita.
Es decir,no hay limites
4.0 mata esa variedad y pone a los PJs ante pura mecánica,sin sentimiento ni imaginación.Y eso es muy malo en los juegos de rol,pero en D&D es mortal,de ahí que hubiera tantas quejas con 4.0 que intentan arreglar en 5.0
Ya te digo, aquel D&D era mortal!!
prueba con pathfinder, es como 3.5 algo mas mejorado, ademas ya hay cientos de libros